COVID-19

"No se espera que un paciente tenga que tomarse a sí mismo todas las precauciones y cuidados"

Habló el hermano de una contagiada.
Habló el hermano de una contagiada.

Este martes 19 de mayo, Pedro Andrade, hermano de la segunda persona confirmada de COVID-19, detalló el trato del Hospital Municipal “San Vicente de Paul” hacia su familiar y pacientes positivos.

En dialogo con el diario El Cronista, brindó un panorama sobre la situación que vivieron durante estos días los pacientes confirmados por covid-19, entre ellos, su hermana, con quien ha mantenido comunicación constante a través del celular.

Actualmente la mujer se encuentra estable luego de haber presentado los primeros síntomas de la enfermedad, pasado por terapia intensiva, y “estado un tiempo con retrovirales y darse cuenta de que eran lo que le estaba descomponiendo. A los tres días decidieron quitarle y entró a estabilidad sin fiebre donde permanece la neumonía”, comunicó Andrade.

Asimismo, dijo que no cuentan con las partes medicas sobre el avance de la enfermedad, “nunca llamaron para entregar las partes. Ella no lo conoce y nosotros nunca recibimos un llamado por el parte”. Por ende, solo saben sobre las mejorías que presentó al estar en constante comunicación.

De manera cronológica, Pedro Andrade detalla que el 28 de abril, su hermana, enfermera, atiende por última vez a la primera paciente confirmada de Covid-19. Tomo su semana de descanso y volvió a trabajar el viernes 8 de mayo, sin síntomas y sin su compañera que estaba capacitada, al igual que ella, para tratar a pacientes positivos, “lo que hacía que ella tuviese que afrontar sola las 12 horas”.

Durante la jornada laboral, le asignaron dar de alta a un paciente del Hogar de Anciano, que da positivo y es confirmado el 16 de mayo junto con dos más, siendo un total de cinco ese día, cifra que alarmó a los chascomunenses luego del informe de estado de situación que informan desde el municipio.

El sábado, “cuando se levanta para trabajar, tiene dolores musculares”, se lo comunica a personal de salud y para la tarde levanta fiebre. Le toman la temperatura en el hospital, pero “no consideran otros rasgos que acompañan a la fiebre y la mandan a su casa”.

Sube en su bici y se dirige a su domicilio. La fiebre empeora, “le piden que vuelva y a las seis de la tarde le hacen el hisopado y deciden ahí dejarla internada”. Finalmente, el lunes le confirman que dio positivo en Covid-19. A partir de ahí “comienza su trauma personal”.

Andrade detalla que “durante el primer día, el domingo que ella está internada, nadie entra a la habitación, salvo enfermeras. Ella tiene que ponerse el suero, tiene que tomarse las medidas y empieza a sufrir el aumento de la gravedad del cuadro por los retrovirales”.

“Al cabo de tres días, en un momento de flaqueza va al baño y empieza a vomitar”, sujetada del fierro del suero empieza a llorar y desde las cámaras de monitoreo, actúan y “sacan los retrovirales para que se estabilice y después ella pide ser pasada a un lugar conocido donde anteriormente trabajaba con compañeras”, que es aceptado al ver la mejoría.

Resume su hermano, que solo la atendían cuando se requería. Mientras pudiera hacerlo le dejaban las herramientas, “no se espera que un paciente se tenga que tomar así mismo todas las precauciones y cuidados, aunque este paciente lo sepa”, expresó.

Luego, al confirmarse tres nuevos casos positivos, llegan a las salas del nosocomio y empieza “toda esta cadena de hechos que ellos interpretan como discriminatorios o que no es el tipo de atención que merecerían”.

La decisión que tomó Pedro Andrade de hacer público la realidad vivida por los pacientes positivos, paso al ver el sacrificio que estaba haciendo su hermana y todos los chascomunense, “mientras que, del otro lado, las acciones no son reales, son meramente políticas”, y cuando se confirma el total de casos en Chascomús “se comportan poco profesional”.

A su vez, hizo mención al comunicado que brindo el Director del Hospital Municipal “San Vicente de Paul”, Jorge Rodríguez, con quien tiene una amistad y entiende, por su parte, que deben separarse las cosas, “sale a dar explicaciones donde deja entrever que la culpa sería, en este caso, de mi hermana o de cualquier otra persona que vaya y esté trabajando en el hospital. Ellos no comparten ninguna responsabilidad”.

Ante las situaciones desbordantes, Pedro puso su voz para hacer eco de los pacientes, quienes se encuentran internados en el hospital y no tienen la posibilidad de visibilizar los hechos. “¿Vamos a dejar que esto avance hasta que sean 30 los que entren acá adentro y no puedan tomarse la fiebre y no sepan colgarse el suero?”, exclamó.

Atención psicológica para pacientes de Covid-19

Según supo El Cronista en conversación con Pedro Andrade, la atención psicológica se realiza por llamada telefónica cuando el paciente lo solicita. En este sentido, Pedro comentó que su hermana “le expresa la disconformidad y la aberración de lo que se estaba cometiendo” a la profesional.

Y el pedido se desprende porque durante esa tarde, el director del Hospital Municipal “les dice si querían ser trasladados a Buenos Aires. Todos se horrorizaron y argumentaron que no había un criterio médico para ser trasladados”.

La situación generó un pánico entre los pacientes con covid-19 y en eso, su hermana solicita la atención psicológica. Luego se comunicó con él, quien decide hablar sobre la cruda realidad que viven dentro de las salas.

Finalmente, Pedro Andrade dijo que esperan la pronta recuperación de su hermana, quien se encuentra internada en las instalaciones del hospital, y que las autoridades a cargo tomen cartas en el asunto sobre el trato hacia los pacientes positivos de Covid-19 en Chascomús.

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