Guillermo Iribarren tiene un hijo de 15 años que trabaja como playero en un conocido restaurante de la ciudad, Con los ingresos que gana durante el fin de semana, el joven sostiene los gastos de sus estudios y colabora con su familia.

En la mañana de FM por siempre, Guillermo contó que durante la madrugada del sábado, una vez finalizada la jornada laboral, el muchacho procedía a trasladarse a su casa en su bicicleta cuando fue interceptado en cercanías de la vieja estación ferrocarril por dos personas que lo amenazaron con un arma blanca para que entregue el rodado.

El menor no tuvo opción y accedió al pedido de los ladrones y se quedó sin su medio de transporte.

Claramente Iribarren expresó la bronca, dado que la bicicleta fue comprada con los ahorros que pudo juntar a raíz de su trabajo de fin de semana.

La bicicleta es de los modelos inglesa y de color negra; contaba con gran parte de su armado nuevo dado que el joven había invertido dinero en mejorarla.