Los administradores de las cabañas “Altos de la Laguna” de Chascomús, por intermedio de un comprador, tomaron conocimiento que su predio era utilizado para hacer estafas a posibles turistas.

El lugar para hacer las estafas es a través de Facebook por intermedio de “market place”, sector de ventas que tiene esta red social.

En este marco, Alejandra Sebastia, administradora del lugar, recibió un llamado de un “cliente” para que le confirmara algunos datos, pero con el correr de la charla notó que le hablaba de una quinta, de market place y ahí se dieron cuenta de la estafa.

El estafador ofrecía el lugar como una quinta, la cual la alquilaba por 10 mil pesos por semana, y en la dirección figuraba “Altos de la Laguna” en Chascomús, pero las fotos no coincidían y esgrimía que “habían hecho reformas”.

Ante esta situación, Sebastia se hizo pasar por una “interesada” en la quinta y ahí consiguió los datos del CBU y el nombre del estafador, al cual reportó en Facebook y también hizo una denuncia en la comisaría local como “delito cibernético”.

Ahora Sebastia espera que no hayan sido muchos los estafados que se puedan aparecer en el establecimiento solicitando su lugar, el cual no va a estar disponible por lógicas razones.

Sobre lo que se viene con la apertura al turismo dijo “tenemos muchas consultas y el 1° de diciembre arrancamos con huéspedes” agregando “va a ser una experiencia nueva para ver cómo se va manejar el huésped y nosotros, cumpliendo los protocolos y todas las medidas de seguridad nuevas”.

En diálogo con Leandro Solferino, en el aire de Libres del Sur FM 90.1, también hizo un análisis de lo que fueron estos meses sin turismo: “la pasamos mal, fue muy difícil, con falta de ingresos, a pesar de que estábamos entre los habilitados para recibir esenciales ya que eso movía muy poco volumen de huéspedes y no daba para solventar los gastos mínimos”.

Volviendo a la temporada venidera, expresó: “dentro de todas las complicaciones esperamos que sea un buen verano, a Chascomús va a venir mucha gente por la cercanía y al tener menos circulante de gente que la costa, quizás anime a la gente a volcarse a nuestra ciudad”. 

Acerca de los protocolos en su complejo, destacó que “nosotros decidimos cerrar el solárium, ya que cada cabaña tiene un espacio de parque y ahí lo utilizarán los huéspedes para tomar sol, en la pileta está la seguridad dada por el cloro, aunque también tendremos un cupo de personas para ingresar a la vez, eso ya es algo que le aclaramos a los turistas, no queremos llegar a tener que poner horarios para cada grupo familiar, pero si no se respetan los protocolos lo tendremos que hacer, es todos nuevo y creemos que la gente se va a adaptar a las nuevas reglas”.