En el consultorio de Cesación Tabáquica, que impulsa la Secretaría de Salud Pública, trabaja un equipo multidisciplinario integrado por el médico general, enfermeras y promotores de salud.
A través de este consultorio, se llevan adelante tratamientos de intervención individual y de tipo cognitivo-conductual, cuyo propósito es la cesación del hábito de consumo de tabaco por parte del paciente.
El humo del tabaco contamina los ambientes cerrados ya que contiene más de 7.000 sustancias químicas, 69 de las cuales pueden producir cáncer. Aunque el humo puede ser invisible e inodoro permanece en el aire días, meses y hasta años, exponiendo a las personas a un gran número de sustancias tóxicas.
Las principales enfermedades que producen la muerte en los fumadores son las cardiovasculares, pero también provoca decesos por Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), cáncer de pulmón, neumonía y exposición pasiva al humo de tabaco ajeno.
En promedio, un fumador vive 10 años menos que un no fumador. Además, uno de cada 4 fumadores llega a perder más de 20 años de vida como consecuencia del tabaco.
¿Qué medidas se pueden tomar? Lo mejor que puede hacer el fumador para prevenir estas complicaciones es dejar de fumar. Por eso, es clave que busque ayuda en el consultorio de cesación tabáquica que funciona los martes de 13 a 17 horas.
Los interesados deberán solicitar turno en la ventanilla de admisión (se encuentra ubicada en Bulevar 5 esquina calle 2 – barrio 30 de Mayo) o por consulta telefónica a través del siguiente número: 2241-588248.
