La Municipalidad de Pila informa que este lunes, personal policial de la ciudad recibió un alerta radial por parte de la Estación de Policía Comunal General Belgrano, en el cual se solicitaba apoyo para la interceptación y detención de dos individuos que circulaban a bordo de un vehículo marca Volkswagen Vento color gris, quienes resultaron ser autores de un ilícito en ese medio.

Mediante el denominado “cuento del tío”, los delincuentes sustrajeron dinero a varios ciudadanos para luego darse a la fuga por Ruta 41, en dirección desconocida.

Mientras continuaba la búsqueda de los malvivientes,  se registraron denuncias telefónicas de vecinos, quienes brindaron conocimiento respecto a haber recibido llamados en los cuales personas desconocidas habrían intentado despojarlos de dinero y joyas mediante mismo modus operandi, razón por la cual se redobló el operativo policial.

Momentos más tarde, los efectivos policiales de Pila divisaron un vehículo de iguales características al denunciado transitando por nuestras calles, por lo que los interceptó en calles 6 entre 11 y 13.

Una vez asegurada la zona y realizados los cortes de transito respectivos, se ordenó a los ocupantes del rodado el descenso del mismo, dando cuenta de que se trataba de dos sujetos masculinos oriundos de la ciudad de Florencio Varela. Luego, se constató que el  vehículo marca Vw Vento color gris posee prohibición de circular.

Luego de mantener comunicación con personal de Estación de Policía Comunal Gral. Belgrano, se confirmó que se trata de los mismos delincuentes que habían perpetrado el ilícito en la ciudad vecina, razón por la cual se procedió a su aprehensión, como así también a la incautación del automóvil y los aparatos de telefonía celular, que quedaron a disposición de magistrado interviniente.

La mecánica de los delincuentes

Los autores del ilícito llamaban a telefónicamente a las víctimas, refiriendo ser algún familiar, y alegando poseer “la voz tomada” debido a poseer anginas. Luego, argumentaban que en el país estaba por suceder otro “corralito”, o que determinados billetes ya no iban a estar en circulación.

Una vez realizado el engaño, efectuaban preguntas para averiguar si las personas engañadas poseían dinero, oro, algún tipo de alhajas o elementos de valor, para luego pactar así un punto de encuentro.

El municipio solicita encarecidamente a la comunidad que no brinde información telefónica respeto a sus pertenencias, ya que este tipo de malvivientes son experimentados en engaños.