El pasado 16 de agosto se realizó una exposición del Foro Tributario Regional “Escenarios locales: Desafíos para la mejora de la gestión”, llevado a cabo en el salón de conferencias de la Municipalidad de Dolores. Del encuentro participaron autoridades municipales de varios distritos, junto con directivos de ARBA.
Durante la disertación, el secretario de Hacienda Juan Facundo Alfonsín, resumió la situación inicial al momento de la asunción, indicando que “no solo no había dinero en las arcas municipales para afrontar en pocos días el pago del medio aguinaldo y los sueldos de diciembre, sino que se habían utilizado los fondos con afectación específica, se habían emitido cheques con cifras importantes en los últimos días a proveedores ‘habituales’ y, como la prestación de servicios estaba tercerizada casi en su totalidad, la disposición de equipos, herramientas y vehículos era prácticamente nula”.
También relató las gestiones realizadas durante los primeros meses, que permitieron sortear el ahogo financiero inicial y afrontar el pago de las deudas con proveedores y con empleados municipales, estableciendo plazos razonables de acuerdo a las posibilidades financieras proyectadas, ya que los últimos dos ejercicios habían arrojado un déficit de 33 millones de pesos.
Asimismo destacó el trabajo en la generación de ingresos propios y en el ordenamiento administrativo relacionado a los gastos de funcionamiento, poniendo énfasis en la recuperación de vehículos y equipos para prestar la variedad de servicios a cargo de la Municipalidad.
Alfonsín remarcó que todos los municipios de la provincia financian sus gastos de funcionamiento (gastos corrientes) con ingresos propios y fondos coparticipables (establecidos por ley), representando estos últimos, en general, el 50% o más del total.
Agregó a su vez que, “en el caso de Chascomús, históricamente la dependencia de la coparticipación ha sido de casi el 80 %. Hoy está en menos del 70 %. Esto se debe a una combinación de factores: una mejora sustancial de los ingresos propios (en un año y medio recesivo) y la reducción de la coparticipación (claro indicio de la falta de actividad económica)”.
Respecto a la reducción de los fondos coparticipables no afectados, señaló que “dificulta las proyecciones realizadas para este año, pero confío en que una leve reactivación de la economía permita a la provincia mejorar el nivel de la coparticipación para sostener las mejoras alcanzadas en nuestra ciudad”.
También recordó que “una de las herramientas principales de gestión, la Ordenanza Fiscal e Impositiva, recién fue aprobada a mitad del año pasado, y la del corriente año, que tiene modificaciones poco significativas, aún no fue aprobada. Además se está trabajando con el presupuesto 2016 prorrogado ya que tampoco fue aprobado el de este año".
En tal sentido el funcionario destacó que, “a pesar de esto, hemos logrado equilibrar las finanzas, y se gestiona financiamiento en los diferentes estratos del estado para hacer realidad la infinidad de proyectos de obra de infraestructura que hemos elaborado, muchos de los cuales se están ejecutando actualmente”.
Finalmente, luego de un análisis más técnico realizado respecto a las tasas, derechos y contribuciones municipales, el funcionario afirmó que “más allá de algunas decisiones que se toman a nivel provincial o nacional y que afectan directa o indirectamente a los municipios (por ejemplo sosteniendo la infraestructura de escuelas del distrito o afrontando el transporte escolar, ambas obligaciones provinciales) seguimos trabajando para hacer sustentable el municipio y aspiramos a que, al finalizar la gestión, tengamos una mayor participación de los ingresos propios en el total, del 40 al 50 por ciento”.
Planteó que llegar a tales guarismos “nos habrá permitido realizar gran parte de las obras de infraestructura planificadas, mejorar y ampliar muchos de los servicios y empezar a apreciar otro comportamiento de la sociedad a partir de los profundos cambios que estamos llevando a cabo respecto a políticas sociales, culturales y de salud”.