Este jueves 5 de octubre, la secretaria de Salud, Marcela Arias, debía presentarse en el Concejo Deliberante a las 11 para responder las inquietudes de los ediles.

Desde lo que es la Prensa del HCD se intentó decir que tenía compromisos contraídos con anterioridad (que viniendo de una funcionaria pública debería explicar cuáles son), pero al leer la nota, queda expuesto que, en realidad, se amparan en que ingresó con posterioridad a lo que indica el inciso 7° del artículo 108 de la Ley Orgánica de las Municipalidades, la cual reza que debe hacerse con cinco días hábiles de antelación.

A su vez, la misiva, ingresada a las 13:55 horas,  indica que la convocatoria es “meramente política” por el tiempo electoral que se vive y que además los paros hechos por la CICOP también tienen tinte político.

Y casi como descartando que la secretaria vaya a asistir a alguna convocatoria de los concejales, se explayan sobre los conflictos actuales como dando una respuesta a lo que ellos suponen iba a ser las requisitorias por parte de los concejales.

Básicamente, se escudan en un conflicto político, pero además se excusan explicando que el aumento que dan es más alto que el de Provincia y superior al de muchos municipios de la zona.

Por último resaltan que nunca estuvieron adheridos a la carrera profesional  hospitalaria de provincia (cosa que se sabía de antes), que el municipio no adeuda ni un centavo a los profesionales que allí trabajan y que el hospital tiene su propia carrera hospitalaria entre otras cosas.

Cosa no menos relevante es el final de la nota entregada. La misma cuenta con la firma de todo el ejecutivo municipal, que a modo corporativo apoya a su secretaria de Salud y ratifica el espíritu combativo de Javier Gastón y su tropa.

Palabras más, palabra menos, desde el Ejecutivo le hacen “Pito Catalán” a los concejales e indirectamente a la CICOP y a los trabajadores del hospital.